Podemos perder hasta un 20% del tráfico si nuestra web o blog no cargan en tiempos aceptables. Una página web que carga lentamente no sólo aburre a los usuarios, sino […]

Podemos perder hasta un 20% del tráfico si nuestra web o blog no cargan en tiempos aceptables. Una página web que carga lentamente no sólo aburre a los usuarios, sino que también es penalizada por Google. Los primeros nos “castigan” abandonando nuestra página y, quizá, no volviendo nunca más. El segundo relega nuestro sitio web a puestos más bajos en su página de resultados, cuando los usuarios realizan una consulta en su buscador.

Existen numerosas herramientas, muchas de ellas gratuitas o bien freemium (con dos planes: uno gratuito y otro con opciones avanzadas de pago), pero me voy a centrar en PageSpeed Insights de Google, que es gratuita y más que suficiente para descubrir qué está funcionando mal en nuestro website y darnos las respuestas para solucionarlo. No obstante, poco podremos hacer si no tenemos unos mínimos conocimientos técnicos, porque la mayoría de los problemas que vamos a encontrar requieren “tocar código”.

Veamos cómo funciona. Entramos en PageSpeed Insights y en la ventana de texto que aparece ponemos la URL de nuestra página web:

PageSpeed Insights

En apenas unos segundos la herramienta realiza un test de velocidad y otro de experiencia de usuario, puntuados de 0 a 100, por un lado para la versión móvil de nuestra web y por otro para la versión de ordenador o escritorio.

Test de velocidad

Tras el escaneo de nuestra página, PageSpeed Insights nos muestra en rojo los elementos que debemos corregir, en naranja los que “podemos plantearnos corregir” y en verde las reglas aprobadas.

Estas son algunas de las alarmas que Google puede recomendar que subsanemos:

1. JavaScript

Esta regla se activa al detectar que el código HTML hace referencia a algún archivo JavaScript externo que bloquea la visualización de contenido en la mitad superior de la página. Google nos dice cómo corregirlo, pero no son instrucciones aptas para un profano en la materia, ya que nos da consejos tan “sencillos” como éste:

JavaScript

2. Optimizar la entrega de CSS

Esta alarma se dispara cuando una página incluye hojas de estilo externas que demoran la aparición del formato del contenido. Nuevamente se refiere a código y no lo puede subsanar cualquiera.

3. Reducir el tiempo de respuesta del servidor

Si el tiempo de respuesta del servidor es superior a 200 ms, a Google le parece excesivo y nos avisa de ello. Entre los factores que pueden ralentizar la respuesta del servidor destacan:

  • Una lógica de aplicación lenta.
  • Consultas lentas a la base de datos.
  • Un enrutamiento lento.
  • Los entornos.
  • Las bibliotecas.
  • La escasez de recursos del procesador.
  • La escasez de memoria.

Como veis, esta es también una labor para un experto, normalmente del proveedor donde tengamos alojada nuestra web, que debería analizar qué está sucediendo con las bases de datos y la memoria.

4. Optimizar imágenes

Comprimir correctamente las imágenes puede ahorrar muchos bytes de datos. Al contrario que las anteriores, esta alarma podemos corregirla nosotros mismos. Hay bastantes aplicaciones que permiten reducir el tamaño de las imágenes, pero sólo voy a citar dos:

Webresizer. Es una herramienta online de fácil manejo. Es gratuita y no es necesario registrarse. Permite reducir el tamaño de las imágenes, recortar las fotos, perfilarlas, redimensionarlas (anchura y altura), girarlas, ajustar el contraste, el brillo, la saturación, convertir la foto a blanco y negro o añadir un borde.

Webresizer

Paint. Viene por defecto con Windows; se accede a esta aplicación desde Inicio / Todos los programas / Accesorios. Permite reducir en unos segundos el tamaño de una imagen de dos formas: por porcentaje, respetando las proporciones; o por píxeles, indicando directamente el tamaño que queremos obtener. En este enlace, Microsoft explica de forma muy sencilla cómo hacerlo: http://windows.microsoft.com/es-es/windows7/resize-a-picture-using-paintPaint

5. Habilitar compresión

Si los recursos de la página que se pueden comprimir no se han procesado con compresión HTTP, nuestra web puede cargar lentamente. Nuevamente es un punto muy técnico que conviene poner en manos de especialistas.

Cuando todo en nuestra web es correcto y no se detectan este tipo de problemas, la herramienta de Google nos da la enhorabuena y nos puntúa con un 100/100. Es muy complicado lograr esta puntuación en velocidad, porque siempre puede haber una URL o una imagen que entorpezcan la carga de algunos módulos de nuestra página.

Foto: Stròlic Furlàn – Davide Gabino


fuente: Con Tu Negocio

Guía para no perder el 20% de tu tráfico web
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